Hace más de tres décadas las mujeres españolas que podían viajaban a Londres para abortar.Ha pasado el tiempo y los vuelos que transportaban a estas mujeres han sido cancelados.Ya es posible que aquí,en esta nuestra tierra,la mujer decida lo que quiere hacer con su propio cuerpo.Tenemos una ley de plazos que hace que la mujer, que así lo desee, pueda decidir sobre su futuro como mujer y como madre.
Sin embargo,negros nubarrones se ciernen sobre ese firmamento de creencias infinitas y que tantos disgustos nos ha dado.Al parecer,nos van a retrotraer en el tiempo.La vigente ley sobre el aborto,con la llegada del PP al Gobierno de la Nación, va a ser reformada,y lo va a ser para peor.La seguridad jurídica que actualmente existe puede dar al traste y volver a los tiempos del cuarto supuesto,en el que la inseguridad jurídica para la mujer era total.
Y volveremos a ver a mujeres a las que, a última hora, con el embarazo muy avanzado, se les comunica que su hijo nacerá sin cerebro, o deforme, o con un corazón tan débil que apenas si lo mantendrá unos minutos con vida. Mujeres que piden abortar y ya no pueden porque han sobrepasado el límite legal de 22 semanas de gestación;que se acogen al supuesto de sufrimiento psíquico-tan oscuro y arbitrario supuesto- y reciben los insultos coléricos de media España; que acuden a un hospital público y les recibe un médico de misa diaria que aduce objeción de conciencia y gran temor de Dios; que recurren a una clínica privada y les contestan que ahora son malos tiempos para el negocio, con una ley ambigua y algunos jueces envalentonados; mujeres que al final, una vez más, cogen la maleta y salen para buscarse la vida en la verdadera Europa.
Aquí la derechona bajó de los montes y ha reconquistado la plaza pública con los miedos de siempre, con el rencor de siempre, con la hipocresía de siempre. Habían perdido algunas batallas, pero no la guerra. De hecho, llevan dos mil años sin perder ninguna. El nacional-catolicismo nos parecía un engendro medieval, algo imposible de revivir. Pero sólo treintitantos años separan la España de los Alcántara de ésta donde pensábamos que ya reinaba la modernidad. Nos creíamos muy europeos, pero aquí están otra vez, los mismos de entonces, o sus hijos, soñando con teocracias refundadas.
Hubo un tiempo en que la “gente de bien” tomó las calles. Llamaban indignados a las emisoras (a la emisora), denuncian infanticidios a plena luz del día, amenazaban con el fuego eterno a los currantes de las clínicas. Y es que sus hijas no abortan, y eso les confiere una "fuerza moral imbatible". Sus hijas interrumpen el embarazo, rectifican un error de juventud, subsanan las consecuencias de un olvido o de una borrachera. Pero no abortan. Rehacen sus vidas. Son buenas chicas que siempre entran en los supuestos legales. Y si no, se los compran. Nunca se las ve en una sala de espera, ni reciben la inesperada visita de la Guardia Civil citándolas por orden de alguna señoría, al que se le nubla la vista y sólo ve delitos de malas mujeres.
Si el aborto fuera otra vez ilegal, ellas seguirían rectificando en el extranjero, o en la clínica de un amiguete. Para esta gente el aborto no es un problema. El problema es la reconquista de la Patria, de los privilegios, y para ello necesitan a los curas. Sin ese ejército nunca podrían ganar la guerra. ¿Que los ensotanados piden a cambio acabar con la libre decisión de la mujer? ¡Pues se les concede.!¡Qué más da.! La ley siempre ha sido la losa de los pobres. Y pobres sólo son las tontas, o las que no quieren cargar con una maternidad no deseada. ¡Que otra vez tengan más cuidado!¡Qué no sean tan distraidas!
15 comentarios:
No puedo decir más, lo has reflejado perfectamente.
Saludos
Me pasa como a Emilio. Nada que añadir. Decirte que de acuerdo en su totalidad en tu acertadísima entrada.
Un beso, Felipe
¡¡Y esto no ha hecho más que empezar!!
Ni siquiera los que les han votado se merecen este puto gobierno.
Besos
Una casta de HIPÓCRITAS que no quiere dejar vivir tranquilos a los demás.
Así nunca podremos avanzar, llevamos décadas haciendo un poquito y después deshaciendolo todo. Este país se quedó en el baile de la yenka de los años sesenta.
Bicos
Ojala tambien se autorizase el aborto a todas las mujeres cuyos hijos dieran muestras de simpatía católica. Hasta los coj... estoy. Un abrazo.
Son unos hipócritasdetodalavida. De verdad que clama al cielo.
Habrá que pensar (una vez más) qeu la estulticia abunda más de lo que podemos suponer. ¡Cómo se entiende si no, que todo el mundo se queje, todo el mundo reclame derechos sociales, libertad para todo (dentro de los parámetros legales), y luego en Europa, en España, "manda y gobierna" la derecha que nunca se marchó...? Sí, la derecha hereditaria del franquismo...
El tema de la Santas (Secta) Iglesia, no tiene parangón: se frotan las manos con estos caciques en el poder. Yo, odio con toda mis fuerzas a esa iglesia y a todos sus acólitos, obispos, cardenales y papas... estoy hasta los mismísimos, de ver un día sí y otro también, cómo esta sociedad retrocede, no avanza... luego le llaman sociedad avanzada... ¡Y una mierda! (sin perdón).
Saludos utopazzianos, esperando a los marcianos.
Estupenda entrada Felipe. Se puede decir más alto pero no más claro.
Los de siempre continuarán solucionando los problemas de sus amantes o sus hijas e intentando meter en la carcel a toda mujer que quiera decidir sobre su maternidad.
Salud, República y Socialismo
Pues como decía una viñe
ta de público: llueve caspa...
Un abrazo.
¡Qué horror, Felipe! ¿Cuánta tontería, maldad e ignorancia nos quedará todavía por aguantar y sufrir de estos "seres"?
Besos.
Oh, dios, qué terribles paralelismos hallo.
Un abrazo, Felipe
Regresamos al pasado, pero no sé si con fuerzas para luchar de nuevo y volver al presente...
Saludos
Hola Felipe. Para los supuestos que comentas en el post, como malformaciones, etc, hay un supuesto específico, no es necesario acogerse a sufrimiento psíquico de la madre.
Bueno, en cualquier caso, tiene gracia la cosa, porque un porcentaje abrumador de los abortos se dan antes de las 22 semanas, no suelen darse abortos en avanzados estados de gestación, a no ser que haya un problema de salud grave para la madre o el feto, es decir, las mujeres somos mucho más responsables de lo que piensan nuestros gobernantes, por eso mismo el anterior gobierno decidió contar hasta las 22 semanas en la ley de plazos que curiosamente, médicos de todas las ideologías admiten que es a partir de entonces cuando se le considera un ser vivo (es biología, no ideología).
Es una vergüenza como se ha tratado este tema, que parece que las mujeres, como no tenemos otra cosa que hacer por las tardes, acudimos en masa a abortar... Y no está de más recordar que la maternidad y los derechos reproductivos, son eso, un derecho, y no una obligación.
Un saludo
Gentuza, eso es lo que son, como tu dices, los pobres a soportar las leyes que fabrican los ricos y que a su vez se las saltan cuando les da la gana, para eso está el dinero. Si, la derechona de nuevo ataca. Por aquí decimos "paciencia paisano", es lo que toca.
un abrazo
Perfecto retrato de la hipocresía de la Iglesia y de la derecha española. Lo suscribo 100%.
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