25 ene 2012

Niño saharaui

Rescato un viejo escrito que hice un verano en el que los niños saharauis pasan unos días de vacaciones acogidos por familias españolas.


"Niño negro,ángel negro,en cuya piel late la inmensa noche del desierto.Una mirada de abisal tristeza,hundida en un mar de generaciones marcadas por la guerra,el éxodo y la miseria.Sólo es un niño,una esperanza,y sin embargo nació maldito, estigmatizado por la crueldad y la avaricia.Es el hijo hermoso de la pobreza,de los desheredados del Sahara que aguardan en el infierno estival de Tinduf.

En este mundo de hadas,concebido al margen de la amargura,que nos observa desde el otro lado del mar,es posible un sueño de verano.Para Mohamed se abrirá,por un tiempo,las puertas del cielo.Le dirán que es en la cama y no en la alfombrilla donde se duerme,conocerá que hay estanques de agua sólo para jugar,que las bicis no son un medio de transporte sino una diversión,que la mayor magia emana de las fuentes y de los grifos,que existe un mundo verde y frondoso bajo el sol... Y cuando acabe el sueño del verano,volverá a su realidad convertida en tiendas y barracones calcinados por el calor;un refugio de piedras y arenas en el que ondea una bandera y la demanda cansina y desoída de una patria.

Quizás este niño y otros como él ya no quieran crecer,a la espera de que llegue un nuevo verano que les rescate de Tinduf y les descargue una vez más en un aeropuerto español.Quizás estos niños,intermitentes huéspedes del cielo,ya sepan que los años les alejarán de las entreabiertas puertas del primer mundo,que la adolescencia les condenará a no ser ya amparados,que la juventud y la desesperación les convertirán en carne de pago arrojada sobre una patera en el vacío del mar.

Ángeles de piel negra sin cielo.Cielo de piel negra bajo el recuerdo de Tinduf.La madre saharaui,en un gemido opaco,embarca todo su amor y todo su dolor.Tinduf, refugio de los sin cielo,de los apátridas,de las pieles escarchadas de escarnio sobre un pacífico suspiro.Mohameh,ángel negro,niño negro,recuerda Tinduf y a la madre saharaui,mientras el cielo que lo acoge se engalana y muestra con renglones de pasión las semillas cautivas del amor y la bondad.

Piel negra bajo el cielo español y un hermoso recuerdo que contará a su familia bajo el sol primigenio del pedregal,donde mora un niño saharaui de ojos negros con hechizos de injusticia.

Y,al final,todo seguirá igual:pobreza,dolor de bandera sin patria,una jaima deshilachada como aposento y una madre saharaui prisionera de su amor."


9 comentarios:

Winnie dijo...

Yo sólo quiero y deseo que los niños sean y sigan siendo y les dejemos ser niños....un beso

Genín dijo...

No se, aparte de que traerlos para atender enfermedades, realizar intervenciones quirúrgicas y demás me parece muy bien, aquí se lo van a pasar genial, pero cuando regresen y vuelvan a esa vida prisioneros de lo que acontece en su país, sinceramente nunca lo he tenido claro y sigo sin tenerlo, si es o no beneficioso para ellos, en cualquier caso no estoy en contra, no parece que les siente mal...
Salud

Ysupais dijo...

No sé que pensarán los psicólogos de estos niños y me refiero a su vuelta, al igual que dice Genin, no si les hará odiar a su pais ya que no ven otra solución. Yo pienso que las ayudas se deberian remitirse alli, en fin ....me es dificil definirme, pues he visto como los niños viven esas vacaciones aqui...tienen tanta capacidad de adaptación que lo superan todo.
Saludos.

Emilio Manuel dijo...

Felipe, comparto punto por punto lo que manifiestas, es más, al final, cuando dices: "todo seguirá igual", creo que la cosa no es así, sigue peor, esto lo digo en tanto que estos chavales se dan cuenta muy pronto de que el mundo está mal repartido, su vuelta a casa es peor en la medida de que se dan cuenta de las carencias que tienen, surgen problemas familiares, en algunos casos desean quedarse con la familia de acogida, se dan situaciones complicadas.

Reconozco que cuando llega el verano y se publicita esta ONG realizando estas "buenas obras" me genera "mala conciencia".

Saludos

Dilaida dijo...

No sé, por un lado, pienso que dos meses en la vida de estos niños no significa nada y por otro lado pienso que para ellos puede ser una buena experiencia.
Aquí, en Ourense, lo organiza la Concellería de Benestar Social y las familias que quieren se van a apuntar. Hay niños que repiten varios años con la misma familia y eso es muy positivo.
Bicos

RGAlmazán dijo...

Una iniciativa loable. Y aunque la vuelta a su hogar les haga ver la realidad, me parece que vale la pena esos dos meses de vacaciones. Una ilusión que no olvidarán, aunque quede lejos de ser la solución a su situación.

Salud y República

Ciberculturalia dijo...

Estupendo relato, Felipe. Aunque no sea la solución que queremos para el pueblo saharaui, mientras les llega la libertad, al menos durante dos meses algún niño puede sonreír.
Un beso

buda dijo...

Una cruda realidad,desde luego,pero solo con verles esa carita,merece la pena.

Un besico

Rita dijo...

En Canarias vemos mucho esas familias que colaboran, me parece una obra maravillosa, se podría pensar como dice Genin, que luego al llegar de nuevo al Sahara el desconsuelo será mayor pero también es un modo no solo de hacerles disfrutar de cosas que no conocían, de ser niños, también es una manera de abrir sus fronteras, que sepan que lo que tienen no es la única vida, que hay otras cosas y eso despertará en ellos el inconformismo y deseo de cambiar las cosas, desde luego no viniendo en pateras y dejandose la vida, eso no, pero rendirse tampoco, ojalá que esa vida tenga un final y que los saharauis vean pronto la salida a sus problemas.
Bello escrito Felipe, pero triste, muy triste e ilusionante a la vez
Bsss